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editorial [5] Raquel García Fuentes Presidenta del COF de Zaragoza No pueden dejar de lado el enorme potencial que tienen tantos profesionales sanitarios de primer nivel Un año crucial llegó 2023. Un nuevo año, con sus ilusiones y sus proyectos. Los inicios de ciclo siempre son propicios para hacer este tipo de balances. Actualmente, nos enfrentamos a un ciclo de cambios en el panorama político, donde la Sanidad adquiere un papel protagonista, especialmente por las tensiones sufridas durante la pandemia de COVID-19, que parece que dejamos atrás. A nivel profesional seguimos trabajando de la mano de la Consejería de Sanidad para poder aportar nuestra visión de la profesión y reivindicar nuestro papel como profesionales sanitarios imprescindibles para que el sistema sanitario funcione como una maquinaria bien engrasada. No pueden dejar de lado el enorme potencial que tienen tantos profesionales sanitarios de primer nivel que, desde tantos ámbitos de nuestra profesión, son referentes de salud y referentes sociales para la población que atienden. En el caso de la farmacia comunitaria, la gran mayoría de las veces, desde una población alejada de los grandes núcleos urbanos y como único profesional sanitario estable en el tiempo. Es poco inteligente desperdiciar semejante potencial y no darle su lugar y su papel dentro del sistema sanitario. Tanto a nivel local, como autonómico y nacional. Por ello quiero compartir estas propuestas para mejorar la calidad, la eficiencia y la equidad del sistema sanitario, con la participación activa de nuestra profesión: 1. Aumentando la capacidad asistencial de la Atención Primaria a través de la concertación de servicios de Atención Farmacéutica en las farmacias: adherencia terapéutica, SPD, conciliación de la medicación al alta hospitalaria, seguimiento farmacoterapéutico… 2. Integrando al farmacéutico y la farmacia comunitaria en las estrategias autonómicas y en sus redes de vigilancia, con programas concertados de promoción de la salud, prevención de la enfermedad, cribados, vacunación, etc. Apoyándose en una red de farmacias centinelas. 3. Mejorando el acceso de los ciudadanos a los medicamentos del ámbito hospitalario mediante la dispensación colaborativa entre los servicios de farmacia hospitalaria y farmacia comunitaria. 4. Impulsando la Atención Farmacéutica Domiciliaria desde las oficinas de farmacia, para colectivos vulnerables, de manera planificada y regulada. 5. Evitando la interrupción de los tratamientos, facilitando la actuación del farmacéutico en la dispensación en situaciones excepcionales, como tratamientos crónicos y desabastecimientos. 6. Avanzando en nuevas funcionalidades de la receta electrónica, mejorando la comunicación e incorporando la creación del informe farmacoterapéutico digital del paciente, con acceso para los farmacéuticos y resto de profesionales sanitarios. 7. Asegurando la viabilidad de la red de farmacias rurales, para garantizar la cohesión y la equidad en la asistencia sociosanitaria: remunerando Servicios Profesionales Farmacéuticos, además del margen de dispensación, promover incentivos fiscales específicos y articular la remuneración por los servicios de guardia continua que desarrollan. Quizás pueda parecer ambicioso e incluso irreal o inalcanzable… aunque, para conseguir algo, antes debemos soñarlo. n

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